El Gobierno griego suspende la liga de baloncesto tras el caos en el Olympiacos-Panathinaikos
El Gobierno griego ha decidido suspender temporalmente la liga de baloncesto después del caos generado en el segundo partido del "playoff" final entre el Olympiacos y el Panathinaikos. Antes, durante y después del partido hubo de todo: amenazas, peleas e insultos de hinchas y familiares de dirigentes de los clubes.
"El tercer partido de la final que debía celebrarse el miércoles entre el Panathinaikos y el Olympiacos en el estadio OAKA se suspende", señaló el portavoz del Gobierno, Pavlos Marinakis. Según Marinakis, ese mismo día el presidente del Panathinaikos, Dimitris Giannakópulos, y los presidentes del Olympiacos, los hermanos Panayotis y Yorgos Angelópulos, se reunirán con el ministro de Deportes, Yannis Vrutsis, "para comprometerse a poner fin a esta situación". Si el diálogo no fructifica, según advirtió, "la liga de este año se suspenderá definitivamente".
Todo empezó cuando unos minutos antes de que empezara el segundo encuentro de la final, el presidente de Panathinaikos entró al pabellón del Olympiacos. Varios hinchas locales empezaron a gritar lemas en los que insultaban groseramente tanto a Giannakopulos como a su hija de 18 años, según puede constatarse en videos publicados por el portal griego Sport24.gr.
El presidente del Panathinaikos se acercó entonces a los árbitros del partido para pedirles que registrasen los insultos de manera oficial y exigirles que se llamase al orden a los hinchas del Olympiacos. No obstante, unos segundos después, ya fuera de sí, Giannakopulos hizo una peineta y otros gestos groseros dirigidos a los hinchas, por lo que los árbitros lo expulsaron de la cancha. Durante al menos media hora, el presidente del Panathiniakos se encontraba en el pasillo interior situado entre la cancha y los vestidores forcejeando con agentes de la Policía que le impedían entrar nuevamente al campo de juego.
"Arréstenme o déjenme entrar", gritó Giannakopulos mientras forcejeaba con los agentes, según se ve en varios vídeos que publicó él mismo en su cuenta oficial de Instagram.
Tras el final del partido, en el que el Olympiacos ganó 91-83 y empató la serie de playoff, Yorgos Angelópulos señaló ante la prensa que "el presidente del Panathinaikos es un vómito". "Lo que ocurrió nunca se ha visto en la historia del deporte griego", recalcó. Otro responsable del Olympiacos señaló que Giannakópulos lo agarró en la cancha y le gritó: "Anda y dile a Yorgos (Angelópulos) que violaré a su hija delante de él".
Tras este incidente y mientras el partido se jugaba, el club de El Pireo interpuso una demanda judicial contra el presidente del Panathinaikos. En un vídeo de una cámara de seguridad del estadio puede verse al empresario corriendo junto con sus personas de seguridad hacia el garaje antes de entrar en dos coches negros y alejarse pese a los intentos de algunos agentes de pararlos. Según la emisora SKAI, actualmente está vigente una orden de búsqueda y captura contra el presidente del Panathinaikos, ganador de la Euroliga el año pasado.
El partido también transcurrió en un ambiente tenso y en el cuarto período el técnico de Panathinaikos, el turco Ergin Ataman, fue expulsado tras quejarse ante los árbitros que el público insultaba a su país natal. "Insultaban a Turquía y a la familia de Giannakopulos. Quienes lo hicieron son unos bastardos", señaló el técnico en declaraciones a la prensa griega tras el partido.