La Copa Davis, el atletismo y el ciclismo completan un veto masivo al deporte ruso

El efecto dominó se extiende sobre el deporte ruso como una mancha de aceite en el mar. Después de la iniciativa del fútbol y el Comité Olímpico Internacional (COI) al decretar o recomendar sanciones a los clubes y rupturas de contrato con las empresas rusas integradas en la industria, el resto de deportes han anunciado su veto al país invasor de Ucrania. La Copa Davis, el atletismo, el ciclismo, la Federación Internacional de baloncesto... Todos se alinean con la respuesta europea a Vladimir Putin. La Federación Internacional de Tenis (ITF) suspendió a la federación rusa y a la bielorrusa de sus competiciones, entre las que destaca su expulsión de la Copa Davis y la Billie Jean King. Rusia es la vigente defensora del título en ambos torneos, una potencia total. La ITF ha suprimido todos los torneos que se disputan en suelo ruso. La Federación ucraniana ha ido un poco más lejos: pide que le quite el número uno mundial al ruso Daniil Medvedev, quien se ha pronunciado con tibieza respecto a la guerra del país vecino. La ATP, el circuito profesional, permite a los tenistas rusos seguir compitiendo en los torneos internacionales, aunque sin bandera ni en representación de su país. El atletismo siguió por el mismo camino que el tenis respecto a los atletas rusos y bielorrusos. El Consejo Mundial del Atletismo acordó imponer sanciones a ambos países «como consecuencia de la invasión de Ucrania», dice en un comunicado. En consecuencia, todos los atletas, personal de apoyo y funcionarios de Rusia y Bielorrusia serán excluidos de cualquier evento en las series mundiales de atletismo con efecto inmediato. Hasta ahora los atletas rusos competían con bandera neutral por el dopaje de estado detectado en el gobierno de Putin. Los próximos eventos incluyen el Mundial de Oregon y el Mundial Indoor Belgrado. El mitin de Madrid, que hoy se celebra en las pistas de Gallur, no contará la saltadora de altura Maria Lasitskene, oro olímpico en los Juegos de Tokio. El ciclismo también ha adoptado medidas similares a través de la Unión Ciclista Internacional (UCI). Los corredores con licencia rusa o bielorrusa no podrán competir en el Mundial que se celebrará en Australia. Asimismo, los equipos de ambos países perderán su licencia, lo cual perjudicará a ciclistas de muchas nacionalidades. Y así el resto de la federaciones internacionales. El baloncesto, la natación, el rugby, el remo, la esgrima... La Fórmula 1, a través de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), permitirá a los pilotos rusos seguir en competición bajo bandera neutral. Es decir, Nikita Mazepin (piloto de Haas) puede continuar en el Mundial de F1. La multinacional Adidas suspendió su patrocinio con la Federación Rusa de fútbol. Según dijo la compañía, el 2,9% de su negocio lo hizo en 2020 en Rusia, Ucrania y las exrepúblicas soviéticas.