El tie-break le encanta
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Darío Nicolás Manín se metió en las semifinales de Adelaida (7ma.) tras una remontada memorable y cerró el año con una sonrisa: derrotó a Martín Pertierra por 7-6/7-6 en un partido maratónico que terminó cerca de la medianoche y que fue el último encuentro oficial de CircuitoTenis en 2025.
Fue un duelo largo, físico y mental que se extendió por dos horas y media. El primer set ya marcó el tono de la noche: parejo, tenso y sin margen para distracciones. Manín lo resolvió en el tie-break con autoridad (7-1) mostrando desde temprano que en los momentos decisivos su experiencia pesa.
Pero lo más impactante sucedió en el segundo set. Pertierra parecía tener el parcial encaminado: se adelantó 5-1 y todo indicaba que el desenlace del duelo se daría en un dramático súper tie-break. Sin embargo, Manín se mantuvo firme en su plan de juego y, con convicción y mucho tenis, dio vuelta un set que estaba prácticamente perdido. Nico eligió bien cuándo atacar, voleó con autoridad en reiteradas ocasiones y fue minando la confianza de su rival punto a punto. La remontada fue total: levantó ese 5-1 adverso, llevó el set al tie-break y allí volvió a imponer su temple, ganándolo de manera contundente por 7-0.
Con este triunfo, Manín —campeón cinco veces en novena y una en octava— queda a dos pasos de conseguir su primer título en la séptima categoría.
En semifinales se enfrentará a Nicolás Palumbo, con quien mantiene un historial muy parejo: se enfrentaron dos veces y cada uno ganó una, además de un tercer encuentro en el que Manín no se presentó. Un cruce abierto, con promesa de tensión y con un lugar en la gran final como recompensa.