Brillante Choi
El Torneo de Shanghái tiene una nueva reina, y su nombre es Elizabeth Choi. En una demostración de tenis espectacular y dominancia absoluta, Choi se alzó con el título tras derrotar en la final a Candelaria Cura en sets corridos, con un marcador arrollador de 6-0 / 6-1.
La final, que se esperaba tensa y equilibrada, se convirtió en una exhibición unilateral del talento y la precisión de Choi.
Un Primer Set de Perfección
Desde el primer punto, Elizabeth Choi estableció un ritmo frenético y una intensidad que Candelaria Cura no pudo igualar. El primer set fue un manual de tenis ofensivo: saque potente, winners angulados y una defensa impenetrable.
En tan solo minutos, Choi liquidó la manga con un contundente 6-0, logrando el bagel y dejando claro que estaba decidida a no ceder ni un ápice de terreno. La presión ejercida por Choi resultó en numerosos errores no forzados de Cura, quien luchó por encontrar la forma de romper el impecable juego de su rival.
La Consagración en el Segundo Parcial
Candelaria Cura mostró un breve respiro al inicio del segundo set, logrando finalmente ganar un juego para evitar el doble bagel y recibir el aplauso de ánimo del público. Sin embargo, este fue un esfuerzo aislado.
Elizabeth Choi rápidamente retomó el control. Su derecha fue un martillo, y su revés cruzado se convirtió en una fuente inagotable de puntos ganadores. Con una concentración inquebrantable, Choi cerró el segundo set con un 6-1, sellando la victoria y alzando el trofeo del Torneo de Shanghái.
Candelaria Cura, por su parte, debe conformarse con el subcampeonato, un logro importante, pero que hoy se vio eclipsado por la actuación magistral de una Elizabeth Choi que demostró ser, sencillamente, imparable.

