Los tenistas españoles Pablo Carreño, David Ferrer y Garbiñe Muguruza han debutado con victoria en el torneo de Miami (Estados Unidos), segundo Masters 1.000 de la temporada. Se han impuesto, respectivamente, al uzbeko Denis Istomin (6-1, 6-0), al ruso Evgeny Donskoy (6-2, 6-2), y a la estadounidense Christina McHale (6-2, 6-1).
Carreño, número 19 del mundo, no se encontró con excesivos problemas en su estreno, que liquidó en apenas 47 minutos. Así, se llevó una errática primera manga en la que hizo valer sus cuatro roturas conseguidas -por una de su rival- para ponerse por delante. El asturiano enlazó entonces nueve juegos consecutivos ganando, con el segundo set solventado con un 'rosco', para colarse en la siguiente ronda, donde le espera el estadounidense Steve Johnson, que se deshizo del dominicano Víctor Estrella por un doble 6-3.
Por su parte, 'Ferru' comenzó con buen pie su camino en el segundo Masters 1.000 de la temporada, sumando de paso ritmo y sensaciones para su duro encuentro de tercera ronda ante Alexander Zverev. El alicantino necesitó poco más de una hora para apuntarse un triunfo que encarriló con una sólida puesta en escena. Con 4-0 de inicio, el español sentenció el primer parcial. Se defendió el ruso como pudo en el segundo set, hasta que logró el 'break' el de Jávea en el quinto juego. Otra rotura más en el séptimo dejó visto para sentencia el duelo que le mide ahora con un Zverev que superó también su estreno ruso ante Daniil Medvedev.
Muguruza, número tres del mundo, hacía su primera aparición en el torneo norteamericano después de que la estadounidense Amanda Anisimova, de 16 años y su rival en segunda ronda, se retirase por lesión. Así, descansada en su estreno, la hispano-venezolana sólo necesitó 71 minutos para apear a su primer rival.
En un partido inmaculado, la española no perdió nunca su servicio y se defendió de la única bola de 'break' a la que fue sometida. Sus fuertes restos provocaron el primer error de su adversaria, que le permitió adelantarse 3-2 en el set inaugural. Así, repitió la jugada en el séptimo juego, donde volvió a quebrar, y selló el parcial en poco más de media hora, con el 65 por ciento de los puntos con el primer servicio ganados.
La segunda manga se inició también con rotura de Muguruza, antes de desaprovechar dos ocasiones de quiebre en el tercer juego que mantenían a la norteamericana en el partido. McHale dispuso de su primera oportunidad de romper en el cuarto, pero la española resistió y eso hundió a la tenista local. Desde entonces, Muguruza cosechó tres juegos consecutivos ganados, los dos primeros con cómodos 40-0, y puso fin al encuentro para colarse en los octavos de final, donde le espera una Sloane Stephens que pasó de ronda tras la retirada por lesión de la rumana Monica Niculescu, en un duelo que iba a favor de la norteamericana (6-7(1), 6-3, 4-0).
