Acusan a Laporta de dar «volantazos» e «improvisar» en su gestión

El excandidato a la presidencia, Víctor Font, ha pasado balance del tiempo de mandato que lleva Laporta al frente del club y ha criticado la gestión del actual presidente. «Soy muy optimista. El tren ha perdido un vagón pero es de alta velocidad y si se hacen bien las cosas, el futuro es esplendoroso. Espero que haya aciertos en las decisiones deportivas para competir al menos en LaLiga ya que la Champions es otra historia. Se lo he dicho al presidente varias veces. Sumemos todos juntos porque el rival está en Madrid, en Manchester, en París», empezó explicando el empresario, que aplaudió algunas decisiones como la fichar a Xavi Hernández, a Jordi Cruyff o implementar el voto electrónico pero censuró «los volantazos, cambios de motor en pleno vuelo y la falta de transparencia» de la junta actual. «Entrar a gobernar sin tener un plan funcionó en 2003, 2010, 2015. El silencio no quiere decir que estemos de acuerdo con lo que ha pasado pese a que anticipábamos que podían pasar cosas pero hemos tenido una actitud empática con el presidente», expuso. «No me hace especialmente feliz pensar cuánta razón teníamos. Decíamos que el Barça era un tren que iba a 200 km/h que se estrellaba contra la pared. Entrar a gobernar el club sin saber qué vas a hacer era una temeridad. Nosotros teníamos un plan para los primeros 100 días: reducir masa salarial y deuda. Queríamos reducir pérdidas pero acabaron con 481. En lugar de palancas, nosotros teníamos previstos socios estratégicos para trabajar en líneas de negocio, tener 'fair play', retener a Messi y contar con Xavi», expuso Víctor Font, que profundizó en la salida de Messi: «Con el plan previsto y su voluntad de seguir, se habría quedado. Ahora hay que intentar reforzar los lazos entre Messi y el barcelonismo. Y apoyaremos al presidente y la junta si esto se hace porque es clave». Font también discrepó sobre la forma de llevar el club actualmente: «El Barça no es una empresa y menos familiar pese a que las hay familiares muy bien gestionadas. Eso de empresa familiar denota falta de profesionalidad. Puedo entender y soy empático 100 por cien en que el presidente ha tenido muchas decepciones y quiera tener gente de confianza pero hay un mínimo de talento que debe tener la institución número uno del país, con un margen de crecimiento muy grande. Por eso necesitamos a los mejores y al mejor CEO con visión empresarial». Abordó el terreno deportivo y la necesidad de fichar del Barcelona. «La estructura deportiva quiere a Lewandowski y si se puede hacer económicamente, hay que intentar ficharlo. Creo que acabará viniendo», apostó. Y recordó su proyecto electoral: «El actual organigrama se parece al mío en piezas clave. Fichar a Xavi es la mejor decisión de 16 meses de mandato pero la estructura debe ser global en que todo encaje, incluida la vicepresidencia deportiva. Es un déficit que tenemos. Xavi es la persona más optimista que conozco, más incluso que el presidente. Los años previos a las elecciones fueron intensos y eso requería un conocimiento. Tuvimos mucha relación personal y profesional trabajando la estructura. La relación sigue en el plano personal. Le veré el viernes y nos vemos a menudo. Estamos en las mejores manos posibles y hay que ayudarle lo máximo posible». Más tajante se mostró con la situación de Ousmane Dembélé: «En este tema, yo recuerdo cuando hablaba de Neymar. La parte institucional lo eliminaba. Con Dembélé, pasa lo mismo. El club está por encima pero Dembélé ha tenido falta de compromiso. Le habríamos dicho a Xavi que no podríamos tratar con un jugador así».