¿Dónde ver el deporte en directo en la temporada 25/26?
El panorama de los derechos audiovisuales deportivos en España para la temporada 2025-2026 cuenta con un ecosistema complejo e interconectado. Ya no se trata solo de una pugna entre plataformas, sino de la apuesta de las competiciones -tal vez necesidad- de avanzar hacia una mayor exposición mediática. Y eso empuja a un modelo híbrido donde la compra y la sublicencia de derechos son el pan de cada día en el camino por rentabilizar las inversiones en la compra de derechos, que se estima que anualmente ronda los 1.800 millones de euros sólo en España, según datos de ‘Intelligence 2P’, la unidad de estrategia e inteligencia de mercado de 2Playbook. El mapa audiovisual del deporte en España tiene dos actores clave: Movistar Plus+ y DAZN. Ambas compiten y cooperan al mismo tiempo, repartiéndose derechos clave del fútbol, motor o el baloncesto, mientras que Orange se mantiene como agregador gracias a sus acuerdos de licencia con ambas compañías. A la ecuación se suman servicios globales de ‘streaming’ como Amazon Prime Video, Disney+ o la rebautizada MAX (antigua HBO), que refuerzan sus ofertas con deporte premium. Por no olvidarnos de la reaparición de las televisiones públicas, con RTVE a la cabeza, obligada por ley a garantizar el acceso gratuito a los “eventos de interés general”. El resultado es un mercado más maduro -en España el 63% de los hogares están suscritos a la televisión de pago según datos de la CNMC- pero fragmentado, donde el consumidor debe elegir cuidadosamente qué competiciones priorizar… o asumir varias suscripciones de forma simultánea si no quiere perderse nada. ¿Qué piezas conforman el puzzle audiovisual deportivo?

