La peculiar estrategia de Betis y Atlético en las cifras del traspaso de Riquelme
Rodrigo Riquelme es nuevo jugador del Real Betis tras el anuncio oficial realizado por el club verdiblanco y el Atlético de Madrid en el que se da publicidad al acuerdo alcanzado por ambos clubes la semana pasada para el traspaso del extremo madrileño, de 25 años. La operación desembocará con la propiedad repartida de los derechos de Riquelme entre ambos equipos, con el desembolso verdiblanco de alrededor de ocho millones de euros para hacerse con los servicios del extremo hasta junio de 2030. Sin embargo, la operación tiene una estructura compleja en la búsqueda del beneficio económico de Betis y Atlético en los balances de las temporadas 2024-25 y 2025-25 ante LaLiga. De esta forma hay letra pequeña en este movimiento por el que la compra se formula de una manera pero habrá movimientos futuros para dejarlo todo como se ha dicho: los derechos de Riquelme estarán divididos al 50 por ciento entre los clubes. El Betis inicialmente se hace con el cien por cien de los derechos de Riquelme por 15,5 millones de euros en una operación que computa en el ejercicio 2024-25 en su amortización repartida hasta 2030 para los verdiblancos y como ingreso total para el Atlético, que tiene este mercado para poder utilizarlo. Es decir, paga el Betis inicialmente en ese balance alrededor de tres millones de euros, mientras que el club madrileño puede imputar la venta completa. El caso es que el Atlético está obligado a comprar el 50 por ciento que le corresponde ya en la 2025-26, con lo que los verdiblancos aligerarán a partir de ahí su amortización a la mitad en cada temporada y para los rojiblancos supone un elemento más en sus cuentas presentes. Así se benefician ambos equipos del equilibrio de sus balances para cada una de las temporadas. En definitiva, el Betis acaba esta operación, como ya se informó, la mitad de los derechos de Riquelme por unos ocho millones de euros a través de esta peculiar estructura.