«Ahora, a por el doblete»

La victoria en la final de Copa desató la euforia en el vestuario del Barcelona y liberó la presión acumulada durante una complicada temporada que se asumía como transitoria. Inyección de moral para el equipo catalán, que ahora quiere ganar la Liga para redondear una temporada que puede ser muy buena. «Creo que ha sido un año difícil. Ha sido como la vida, hay veces que te caes y te tienes que levantar. Creo que el equipo es otro en este 2021. En la mayoría de partidos de este año hemos jugado bien. Estoy muy contento y muy orgulloso por todo el equipo. Teníamos confianza en nosotros mismos y sabíamos que daríamos el callo. Hemos jugado muy bien», empezó comentando Gerard Piqué, que regresó a la titularidad tras superar su lesión de rodilla. «Estoy muy contento por los veteranos y los jóvenes, que en momentos de dificultad han dado la cara y han demostrado que pueden jugar muchos años aquí. También contento por la nueva junta. Esto es como empezar de nuevo y el siguiente objetivo es la Liga. Creo que si hacemos el doblete será una temporada más que buena», añadió. Palabras a las que se sumó Jordi Alba. «A principio de temporada nadie daba un duro por nosotros y ahora hemos levantado una Copa», reivindicó el lateral, que estaba feliz: «El 2021 está siendo muy bueno, con una buena racha sin perder. En el clásico merecimos empatar en la segunda parte. Hoy sabíamos que nos jugábamos mucho y el equipo ha hecho un partidazo». Y se pronunció sobre la continuidad de Leo Messi, uno de los temas candentes tras la gran actuación del argentino: «La decisión la debe tomar él. Está comprometido al cien por cien con este club, es el club de su vida». Precisamente, Messi rompió su silencio para valorar el partido, su título número 35 pero no abordó la cuestión de su continuidad. «Fue una Copa muy dura, en muchos partidos sufrimos. Siempre es lindo levantar un título, muy feliz por este grupo que merecía una alegría. Es muy especial ser el capitán de este club, donde llevo toda la vida, es una Copa muy especial. Es muy raro ganar un título y no poder celebrarlo con la afición ni con la familia. Fue un año difícil para nosotros y poder celebrar este título e ir a por La Liga es muy importante. Es un año diferente para nosotros, de transición, con muchos jugadores jóvenes, el equipo se fue haciendo fuerte, hoy nos llevamos este título y todavía queda mucho para la Liga», apuntó, generando cierto optimismo entre la afición culé. «Es una Copa muy especial para mí, y por poder levantarla. Tuvimos la paciencia de tener el balón, y con el segundo tiempo, el Athletic bajó, metimos una marcha más y llegaron los goles». También Laporta estaba exultante. «Teníamos muchas ganar de volver a ganar y lo hemos hecho. Ha sido una gran final contra un gran rival. Los jugadores necesitaban esto. Estamos felices por los jugadores, el cuerpo técnico y la afición. Espero que sea la primera Copa de un ciclo de muchas Copas», comentaba el presidente, que también se pronunció sobre Messi: «Leo es el mejor del mundo, está muy arraigado al club. Estoy convencido que quiere quedarse y haremos todo lo que esté en nuestras manos para que se quede, dentro de nuestras posibilidades. Hoy se ha visto que está arropado por un gran equipo. Se ha jugado muy bien al fútbol». Ronald Koeman respiró tranquilo con la consecución de su primer título. «Es una sensación fantástica. Llegar hasta aquí fue difícil, con prórrogas... Estamos muy felices y nos merecíamos esta temporada ganar al menos un título. El club lo merece. Es un título importantísimo para la entidad, en un año de cambios. El equipo siempre tuvo fe en ganar algo. Es un día feliz para todos los culés. Es un éxito merecido. Hemos hecho cambios en el equipo este año, pero los jugadores se han entregado. Destaco la actitud del equipo, sobre todo en la Copa, en la que hemos sufrido mucho. Hemos tenido hambre. Ya tenemos un título en el bolsillo y vamos a por el segundo. Me siento muy feliz. Yo soy de esta casa», aseguró antes de reiterar que no se siente cuestionado: «No está en mis manos, pero tengo un año más de contrato. Es un curso de cambios. Pero en el Barcelona, a final de temporada, se mira qué has ganado. A veces molesta, porque es un poco exagerado. Pero como entrenador eres responsable y debes ganar cosas. Lo que cuenta son los títulos. Pero la gente que está con nosotros está viendo una línea desde el primer día. Mira los jóvenes que han acabado jugando, esto es el futuro. Hay que luchar por ganar, pero todo el mundo sabe de dónde venimos y que no estamos en el final del túnel. Pero el título demuestra que estamos en el buen camino». Y aseguró: «El Barcelona es mi club. Esta es mi casa. Ha sido duro desde el primer día. Lucharemos por LaLiga hasta el último partido».