La prensa alemana se ceba con el inesperado batacazo de su selección

La tercera jornada de partidos clasificatorios para el Mundial de Qatar 2022 dejó unos cuantos ejemplos de grandes equipos pasando apuros ante selecciones a priori inferiores. A Francia le costó ganar a Bosnia. Lo hizo gracias a un solitario gol de Griezmann (1-0). También por la mínima y en casa venció Inglaterra a Polonia (2-1) con un tanto de Harry Maguire a cinco minutos del final. Mientras que Italia no logró sentenciar su visita a Lituania hasta el descuento, cuando Immobile anotó el (0-2). Incluso España pasó sus apuros ante Kosovo cuando esta llegó a ponerse 2-1 en La Cartuja. Pero el ridículo del miércoles lo firmó la selección de Alemania, cuatro veces campeona del mundo, que cayó derrotada en casa, en el Schauinsland-Reisen-Arena de Duisburgo, por 1-2 ante Macedonia del Norte. Ya antes del descanso se adelantaron los visitantes con un tanto del veterano Goran Pandev. Empataron los teutones de penalti por medio de Gundogan, pero en el minuto 85 Eljif Elmas consumó la tragedia para los de Joachim Löw. Los alemanes, cabizbajos - EFE «Un ridículo histórico» La primera derrota de la selección alemana en su grupo de clasificación, que tras tres jornadas lidera la Armenia del técnico español Joaquín Caparrós con tres victorias, provocó muy duras críticas en su país. Los titulares de la prensa en Alemania no escatiman en contundencia para relatar el inesperado descalabro de su equipo nacional, como el diario 'Bild' que habla de «profunda vergüenza» o de «imagen patética». El rotativo analiza que «un enano del fútbol como el número 65 en el ranking mundial, en el que solo cuatro jugadores están activos en las principales ligas europeas, logra hacer que el cuatro veces campeón del mundo haga un ridículo histórico». Se congratula además de la intención confesa del seleccionador alemán de dejar el equipo después de la Eurocopa que tendrá lugar este verano, aunque se pregunta si «podrá gestionar una Eurocopa decente y una buena despedida de su cargo».