Adquirió la forma en diez días y desea probarse en el campo, examinar su temor psicológico al peroné operado en dos ocasiones para vencer el miedo. Eden Hazard está listo para jugar. Zidane le espera.
El belga quiere reaparecer ya. El Valladolid es el reto, el miércoles, en el estadio Alfredo Di Stéfano. El sigueinte encuentro será el domingo en cancha del Levante. Desea jugar esta semana, antes de la concentración con Bélgica el próximo lunes día 5.
La temporada pasada disputó 22 partidos, marcó un gol y dio tres. Las lesiones forzaron este discreto balance. El jugador sabe que debe reaccionar. Es una estrella y tiene que ofrecer el nivel esperado.
La temporada pasada solo jugó 22 partidos, con un mero gol y tres asistencias. Las dos lesiones cortaron su rendimiento y sus dos pretemporadas sin llegar en forma decepcionaron al club. Ahora tiene que resarcirse
Eden Hazard comenzó hace tres semanas un programa físico personal estricto y adquirió la forma en diez días. Ya solo le preocupaba su tobillo derecho, operado en dos ocasiones por culpa de dos fisuras en zonas distintas del peroné sufridas en noviembre y en febrero de la temporada pasada. Y piensa que debe superar ese reto. Para Hazard es clave recuperar la confianza psicológica en ese peroné diestro que ha perdido su antigua solidez. La meta es que no haya temor para jugar. Quiere examinarse ya.
Ha trabajado bien con los fisioterapeutas y el futbolista pretende jugar cuanto antes, disfrutar de minutos, calibrar sensaciones. Es la continuidad de la competición la que aporta la punta de forma que todo profesional busca. Hazard anhela estar cuanto antes junto al equipo. Obtuvo el alta el pasado miércoles y se ha entrenado desde entonces con la plantilla. Técnicamente está listo para debutar.
El objetivo personal de Hazard es obtener minutos el miércoles ante el Valladolid en casa, en el estadio Alfredo Di Stéfano. Y en todo caso jugar la próxima semana, sea frente al Valladolid o en el campo del Levante el domingo 4 de octubre, un día antes de la concentración de las selecciones para atacar dos nuevos partidos.
