El Cádiz perdió ante el Tenerife por 0-2, en un partido marcado por la expulsión de José Mari Martín-Bejarano en la primera parte sentenciado después por el delantero tinerfeño Dani Gómez, autor de los dos goles que aproximan a su equipo a la zona alta y deja en el aire el liderato en Segunda del conjunto andaluz.
El Cádiz sigue atascado. No gana en el estadio Carranza desde que se reanudó la competición y encajó la primera derrota. Acumula tres encuentros seguidos sin ganar y puede ser rebasado en la cima por el Zaragoza.
El Tenerife, enganchado ya a la pelea por estar en la fase de ascenso, ya pudo marcar a los 7 minutos a la salida de un córner botado por Luis Milla, que cabeceó Álex Muñoz para que Alberto Cifuentes despejase en una gran estirada.
El dominio, muy pausado, era más para el Cádiz, aunque sin mordiente. Sólo lo intentó en un disparo exterior de José Manuel Jurado que Adrián Ortolá envió a córner (m.17).
La jugada clave del choque llego a continuación, en el minuto 22, cuando el equipo local se quedó con un jugador menos al ser expulsado con tarjeta roja directa José Mari por una dura entrada sobre Aitor Sanz.
En superioridad, el Tenerife se echó arriba y pisó con descaro el campo rival, teniendo el control del balón frente a un Cádiz que se dedicó a resguadar su portería.
Pudo convertir en gol el Tenerife una buena jugada iniciada por Milla, con apertura a Luis Pérez en la derecha, que sirvió de primeras al área sobre Daniel Gómez, que en boca de gol no conectó bien el balón cuando disponía de una ocasión diáfana (m.26).
Al filo del descanso, el equipo isleño se adelantó tras un centro del estadounidense Shaquell Moore al que no llegó Milla en el primer palo, pero sí Gómez en el segundo para convertirlo en el primer gol del partido.
En la segunda mitad, sin tiempo prácticamente para que los cambios realizados por Álvaro Cervera se situaran en el campo, volvió a anotar el Tenerife. Un centro de Luis Pérez lo peinó Dani Gómez a gol haciendo inútil la estirada de Cifuentes (m.47).
A partir de ahí, el Cádiz tomó el mando del partido con un futbolista menos. Al equipo de Cervera le costó muchísimo conectar con la zona de ataque, bien protegida por un Tenerife henchido con el marcador a favor.
Alejandro Bermejo pudo marcar el tercero para el Tenerife tras un servicio de Moore que no conectó bien en el corazón del área local (m.61).
La disciplina táctica del conjunto entrenado por Rubén Baraja fue fundamental para sujetar los ataques del Cädiz, que más bien lo que hizo fue tener la pelota sin crear inquietud ante la meta de Ortolá.
