Viento del Alisio muy débil provoca reagrupamiento de la flota sobre el paralelo 22° Sur

Estamos en la jornada 65 Vendée Globe 2020-2021 cuando es martes 12 de enero de 2021; un total de 17 participantes han virado Hornos, y entre ellos los diez primeros ya se encuentran a menos de 5.000 millas de la línea de llegada en Le Sables d´Olonne. Y los dos primeros han recorrido 23.567 millas el «Apivia» y 22.900 millas el «Maître CoQ IV» (ojo con los datos que aparecen en la cartografía, a las 15:00 horas de hoy aparece primero «Apivia» y segundo «Maître CoQ IV»; pero si se pasan sus posiciones a una carta náutica esto cambia).<iframe width="510" height="400" src="https://www.youtube.com/embed/xnYtCDcA4tU" frameborder="0" allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture" allowfullscreen></iframe> Yannick Bestaven se encuentra atrapado entre la costa de Brasil al oeste y un grupo de cuatro competidores por el este, con el agravante que los vientos Alisios del hemisferio sur siguen siendo inestables y de poca intensidad. "Es difícil... Es la dura ley de la regata". “Sabía que había un anticiclón de Santa Helena que se dividía en dos antes de volver a caer sobre nosotros, así que no hay ninguna sorpresa. No hemos sido bendecidos con las condiciones climáticas desde el principio y no es a esta velocidad que vamos a batir récords. Todo el día de hoy va a ser complicado, tanto al este como al oeste. Al principio pensé que, si estaba más al oeste, podría salir primero, pero no puedo decir que, de una fila a otra, cambie en todas las direcciones. Estoy donde pude ir con el viento que tenía en mi bolsillo trasero. Estoy haciendo "pequeñas ganancias" tratando de acercarme a la ruta directa. Volveremos a la regata cuando tengamos vientos más establecidos. Hay un poco de chapoteo, sólo para agitar todo el barco y reducir mucho la velocidad una vez que estás un poco lanzado. Cuando se lanza a 5,7 nudos, se detiene a 4,3 nudos. Hace mucho calor, ya 35° grados esta mañana, ayer tenía hasta 38°C. He estado haciendo un montón de maniobras, viradas y cambios de velas. Y esta mañana no lo estoy tocando, lo estoy dejando ir, va derecho, no estoy seguro de que vaya más rápido cuando estoy en él. Anoche hubo tormentas de luz a 12 nudos, así que tuvimos que aflojar rápidamente y no quedó nada. Estas son condiciones inestables”. <iframe width="510" height="400" src="https://www.youtube.com/embed/zMmY5VAUprc" frameborder="0" allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture" allowfullscreen></iframe> Se mantiene el efecto tirachinas para los IMOCA situados mas al norte en aguas del océano Atlántico. Bestaven ya lo ha descrito, y el meteorólogo Chistian Dumard anunciaba: “El grupo líder navega esta mañana con un ligero viento de este a noreste. Está al borde de los vientos alisios. El viento sigue siendo ligero y muy irregular en fuerza y dirección. Por lo tanto, las clasificaciones podrían seguir evolucionando en este inestable viento comercial. El resto del grupo líder debe continuar reduciendo las brechas en las próximas horas. Los barcos más al este se benefician de un ángulo de viento más favorable que el «Maître CoQ IV». Navegar a lo largo de la costa brasileña también puede ser complicado con líneas de borrascas, efectos térmicos y suavidad en la segunda mitad de la noche y en la mañana. Por último, hay que jugar con las corrientes actuales a lo largo del límite de la plataforma continental”. Didac a 300 millas de Hornos En la zona del Pacifico Sur, Dídac Costa se encuentra a menos de 300 millas del paso de Hornos: "Continúo acercándome al Cabo de Hornos navegando hacia la depresión. Hasta el último momento, voy a tener fuertes vientos y grandes mares. Los frentes y las bajas se suceden a gran velocidad y entre estos sistemas, sólo unas pocas horas durante las cuales el viento ni siquiera baja de 20 nudos. He perdido la cuenta de los días o semanas que he estado navegando con vientos racheados, humedad y frío. Recuerdo haber llegado muy cansado al Cabo de Hornos en 2016, pero allí el viento y las condiciones del mar de esta edición fueron mucho más exigentes. Ahora estoy navegando con unos 35 nudos de viento, lo cual es muy irregular. El mar es poco maniobrable, con olas muy verticales que hacen muy difícil que el barco esté bien equilibrado. Me las arreglo para navegar a una velocidad media de 12/14 nudos con picos de 25 nudos en el oleaje. En otras circunstancias, podría ir más rápido, pero esto es difícil debido a la ola corta. Dentro de unas horas tendré que bajar un poco y espero hacer mi última trasluchada en el Pacífico. Un nuevo frente se aproximará desde el oeste y espero que ya esté protegido por tierra. No sé si podré ver el Cabo de Hornos esta vez: al menos tendré la impresión de que el mar se está calmando, y eso ya será un cambio considerable”.