Ambiciones olímpicas en judo femenino
El judo cubano vislumbra ya la primera parada de su calendario competitivo este año, cuando del 11 al 13 venideros seis figuras, tres por cada sexo, participen en el Máster de Doha, Catar. Los criollos saldrán al tatami con la mirada puesta de reojo en los Juegos Olímpicos de Tokio en el verano próximo, donde irán con la ambición de ver al menos a un par de exponentes escalar al podio de premiaciones.
En el caso del equipo femenino, cuenta con tres judocas clasificadas para la magna cita multideportiva, encabezadas por la artemiseña de más de 78 kilogramos (kg) Idalys Ortiz, a quien acompañarán Maylin del Toro (63 kg) y Kaliema Antomarchi (78 kg). Esta tríada, por diferentes motivos, estuvo ausente el pasado mes de septiembre de la Gala de Campeones del Judo Cubano, mas carga con las principales esperanzas del entrenador Yordanis Arencibia.
«En dicha gala hubo mucha rivalidad entre las judocas de cada división y valoramos que a pesar del período de la pandemia, que nos afectó muchísimo, las atletas han venido trabajando e incorporándose a la rutina habitual con rapidez. Estamos valorando todo y enfocados en los Juegos Olímpicos, pero con la mirada puesta también en los Centroamericanos del año siguiente», declaró Arencibia en exclusiva para JR.
Añadió el medallista de bronce bajo los cinco aros y ahora jefe de entrenadores del equipo nacional de judo femenino, que además de los Olímpicos, este año entre las prioridades de sus dirigidas se encuentran los primeros Juegos Panamericanos Juveniles, a efectuarse en septiembre en la ciudad colombiana de Cali.
«Para Tokio estamos tratando de incorporar a una atleta de los 57 kilogramos, hasta el momento Arnaes Odelín, que es la que ha conseguido los puntos suficientes para al menos aspirar. Lo más importante hasta junio es llegar entre las primeras del ranking y asistir al certamen, luego esperar un buen sorteo y trabajar lo mejor posible para buscar los resultados que queremos, que son medallas», explicó Arencibia.
Sobre el estado actual de su principal figura, Idalys Ortiz, el preparador dijo que «físicamente se encuentra bien, estamos trabajando, pero faltan todavía cosas porque llevamos un período corto de preparación como equipo. Ella desgraciadamente tuvo la pérdida de su padre y eso es algo que indudablemente la ha afectado en lo sicológico, pero es fuerte y se ha ido incorporando con total entrega. Estamos concentrados y haciendo estrategias para llegar lo mejor posible a los Juegos Olímpicos».
Por último, el subcampeón mundial de Río de Janeiro 2007 se refirió a la responsabilidad que representa para él asumir un puesto ocupado durante muchos años por Ronaldo Veitía. «Es un reto grande, pero yo estoy acostumbrado a los retos grandes desde que era atleta», valoró antes de concluir en que «estoy trabajando para buscar nuevos relevos, las muchachas están entrenando fortísimo y siempre trataremos de dar lo mejor por mantener en la cima a nuestro judo femenino».