El Eibar sumó un punto frente al Córdoba en un duelo más controlado por los andaluces, pero que evidenció la solidez defensiva del equipo armero. Aunque le faltó claridad en los metros finales y no logró generar grandes ocasiones, la organización, el repliegue y la capacidad para frenar los ataques rivales le permitieron volver a sumar lejos de Ipurua y cumplir uno de los objetivos, dejar la portería a salvo.
El once
El cuerpo técnico de Beñat San José se presentó en el Bahrain Victorious Nuevo Arcángel de Córdoba con Jonmi Magunagoitia bajo palos y una línea de cuatro defensores formada por Cubero, Peru Nolaskoain, Arbilla y Buta. En el doble pivote actuaron Sergio Álvarez y Lander Olaetxea, una de las novedades tras las molestias musculares sufridas por Javi Martínez en el último entrenamiento, que le impidieron repetir en el once y entrar en la convocatoria. Las bandas fueron para Mada, primera titularidad tras la lesión, y José Corpas, con Guruzeta en la mediapunta y Javi Martón como referencia ofensiva.
Orden y fortaleza sin goles
Con ambos equipos acostumbrados a presionar alto, el Eibar fue quien dejó el primer matiz táctico al presentarse algo más resguardado en un bloque medio, preparado para saltar al contragolpe. De ese planteamiento nació la primera acción reseñable del encuentro, que se saldó con la primera cartulina amarilla tras el derribo de Isma Ruiz sobre Martón.
Estudiándose y con cautela, ambos conjuntos alcanzaron los primeros diez minutos sin ocasiones claras, más allá de algunos intentos sin puntería del Córdoba y un par de llegadas del Eibar por ambas bandas que no encontraron rematador. Hubo que esperar hasta el 22’ para ver el primer disparo entre palos, un intento de Carlos Isaac que Jonmi detuvo sin dificultad.
Al Eibar le faltó colmillo en los metros finales para traducir en ocasiones su capacidad para competir. No lo corrigió antes del descanso, al que llegó, de forma sorprendente, sin registrar un remate entre los tres palos, aunque también sin conceder en su área gracias a un sólido trabajo de ayudas y repliegues que transmitió una gran fortaleza en área propia.
El Eibar mantiene la muralla
La segunda mitad arrancó con un único cambio en las filas del Córdoba. Xavi Sintes se quedó en el vestuario tras haber rozado la expulsión en la primera parte, donde, después de ver la primera cartulina amarilla, cometió un derribo que bien pudo costarle la segunda. Con ese movimiento se abrió un segundo acto en el que el Eibar acostumbra a encontrar mayor premio, como reflejan los números: 12 de sus 18 tantos habían llegado tras el descanso.
Sin embargo, el plan diseñado por Iván Ania impidió a los de San José manejar los porcentajes de posesión habituales y, sobre todo, corregir la ausencia de remates a puerta. El Córdoba, por su parte, tampoco encontró el camino del gol y se topó con el larguero tras un palmeo de Jonmi en el 59’.
Ya en el tramo final, San José apostó por Álvaro Rodríguez, Arambarri, Bautista y Magunazelaia, que dieron relevo a Cubero, Buta, Martón y Mada. Ania agotó también sus ventanas poco después y el donostiarra lo igualó dando entrada a Aleix Garrido. Ninguno de los movimientos alteró el guion: el Eibar no logró dar el paso adelante necesario para aspirar a algo más que un punto ante un Córdoba con mayor dominio, pero incapaz de superar la muralla armera.
Lo que viene
La SD Eibar cerrará el 2025 con una doble cita en Ipurua. Primero recibirá al Elche de Primera División en Copa, el martes 16 a las 19:00 horas. Para después poner el broche con la 19ª jornada de LaLiga Hypermotion en la que recibirá al Real Valladolid, el viernes 19 de diciembre a las 20:30 horas.