Alexia saca a España del barro
España completó una eliminatoria perfecta para defender su título en la Liga de Naciones. Sonia Bermúdez se ha estrenado en el banquillo con cinco goles a favor y ninguno en contra ante Suecia, que sigue siendo una de las mejores selecciones del mundo. No fue el partido más brillante de las españolas, que tampoco lo necesitaban. Les bastaba con no tener errores para estar en la final otra vez.
La campeona del mundo ha estrenado seleccionadora, pero hay cosas que no cambian y la semifinal contra las suecas terminó como empezó, con un gol de Alexia Putellas. Un círculo perfecto que termina con la dos veces Balón de Oro con 40 goles con la Roja, la segunda máxima goleadora de la historia de la selección sólo por detrás de Jenni Hermoso.
Alexia es el faro que siempre ilumina a España, una zurda precisa que a veces cambia de pie para seguir marcando goles. En la ida marcó una falta desde el borde del área por la escuadra. Como si hubiera puesto una diana en el mismo lugar, pero esta vez en una de las porterías del estadio Ullevi y con la derecha a pase de Claudia Pina. Entre las dos se han repartido los goles de España, pero eso no es una preocupación para la seleccionadora ni para nadie. España tiene más gol en el banquillo y a Esther, la principal especialista en el área, que se ha perdido esta convocatoria por lesión.
El gol de Alexia remataba un partido inútil. España sabía que estaba en la final salvo catástrofe y las suecas nunca se creyeron que pudieran dar la vuelta a los cuatro goles de la ida. No quiso confianzas Sonia Bermúdez, que mantuvo a todo el equipo de la ida excepto un par de cambios en la delantera. Salma Paralluelo, que tuvo que marcharse lesionada en el partido de ida, y Vicky López, dejaron su lugar a Eva Navarro y a Claudia Pina.
No cambió mucho el juego. España está acostumbrada a dominar los partidos y a eso se dedicó. No pudo evitar que Suecia se acercara, pero lo hacía sobre todo con disparos lejanos que no incomodaban a Cata Coll.
La portera española tuvo que intervenir al final, cuando Suecia se echó arriba a buscar al menos una victoria que le sirviera de consuelo. Hizo dos paradas en la misma jugada, demostrando que además de juego con los pies también tiene agilidad para responder a los disparos de las jugadoras rivales.
Para las suecas, al final, se trataba de eso, de llevarse un pequeño consuelo de la eliminatoria después de ser arrolladas en la ida. De dar una alegría a su afición. Pero España no estaba dispuesta a dejar pasar la oportunidad de completar el recibimiento a la nueva seleccionadora, a la que reconocen como una de las suyas.
Las españolas se quejaban del campo, del barro que no les dejaba hacer su mejor juego. Tampoco lo necesitaban. Fallaron más pases de los habituales y Alexia se esforzó en ayudar a Laia Aleixandri a que la pelota saliera jugada desde atrás.
Aleixandri era la solución de Sonia Bermúdez para el centro del campo ante la ausencia de Patri Guijarro. Una posición que no es habitual, pero tampoco le es extraña. Con ella por delante de la defensa ganó España su primera Liga de Naciones. Pero el partido tenía también algo de cambio de guardia, de dejar paso a las más jóvenes y la seleccionadora hizo debutar a Clara Serrajordi, una adolescente más de las que llegan empujando para dar continuidad a la selección. Ya estaba ella en el campo cuando marcó Alexia, más de doce años después de su primer gol con la selección.
Sonia la mantuvo en el campo todo el partido. Necesitaba seguridad con la pelota, una compañera que diera tranquilidad a Serrajordi, que se estrenó con las dos Balones de Oro españolas a su lado. A un costado, Alexia, al otro Aitana. La seleccionadora prefería dar descansos atrás, permitir que Irene Paredes se ahorrara unos minutos, igual que Ona Batlle y que Olga Carmona. Sólo Mapi León se mantuvo todo el partido de las cuatro que formaban la defensa al comienzo del encuentro.
Para ella y para la seleccionadora se trataba de recuperar la normalidad que ha faltado en la selección y en su entorno desde hace mucho tiempo. Y Mapi aguantó sobre el barro del Ullevi con su número 15 a la espalda. Como en los viejos tiempos, cuando España todavía no era campeona del mundo. Cuando formaba con Irene Paredes la mejor pareja de centrales del mundo, como en el Barcelona. Un triunfo más para Sonia Bermúdez, que esta vez no hizo saltar al campo a Jenni Hermoso. La normalidad también es que Jenni pueda ser suplente y no pase nada cuando España cierra una eliminatoria perfecta.

