A raíz de la gran demora en la Supercopa y los constantes problemas de programación, se creará un protocolo para regular suspensiones y reprogramaciones, donde los clubes que incumplan con ello quedarán expuestos a sanciones económicas y deportivas.
Las suspensiones y reprogramaciones de los partidos han sido la tónica en el fútbol chileno en el último tiempo. Un ejemplo claro de ello fue el retraso que tuvo la Supercopa entre la U de Chile y Colo Colo, la cual se debía jugar en enero y se terminó disputando en septiembre, es decir, ocho meses después de la fecha original.
Con este principal antecedente, que se suma a los problemas que han tenido los clubes para ejercer la localía en diferentes estadios, la ANFP accedió a la exigencia de TNT Sports que busca establecer un protocolo para sancionar las suspensiones injustificadas de partidos.
La señal que posee los derechos televisivos del fútbol chileno con anterioridad había presionado para evitar que repitan situaciones como la de la Supercopa, ya que esto complicaba la calendarización de los torneos y perjudicaba los compromisos comerciales del canal.