Una batalla campal en el centro de Bilbao empaña el pase del Athletic en la Europa League

La noche mágica del Athletic de Bilbao se vio empañada en el día de ayer con una batalla campal en el centro de la ciudad que se saldó con la detención de 14 ultras y 15 personas heridas en los disturbios. Las Fuerzas de Seguridad preveían los choques, que se produjeron antes y después del partido en los alrededores de San Mamés. Así, dispusieron un amplio despliegue de efectivos con el que pretendían ensayar para la gran final que se celebrará en la capital de Vizcaya el próximo 21 de mayo. La tensión comenzó con la llegada de la afición de la Roma al estadio hacia las seis de la tarde. Un primer anillo de seguridad esperaba al grupo, entre los que la Ertzaintza detectó miembros del Frente Atlético, escoltados hacia las inmediaciones de San Mamés . Allí esperaba un grupo reducido de aficionados del Athletic, en su mayoría jóvenes, que, al ver llegar a los italianos, empezaron a lanzar insultos («fascistas» y «puta Roma») y objetos como bengalas encendidas y botellines de cristal. En ese momento los agentes antidisturbios realizaron las primeras cargas, con los jugadores de ambos equipos ya en el interior del estadio. Se produjeron carreras y momentos de tensión, que terminaron con los agentes de la Ertzaintza blindando las puertas de acceso al estadio . Tras estos primeros enfrentamientos dos vigilantes de seguridad resultaron heridos y fueron arrestados cuatro aficionados italianos y dos locales, según ha informado el Departamento de Seguridad del Gobierno vasco. El choque entre ambas aficiones viene de largo, pues ya en el partido de ida de los octavos de final de la Europa League hubo disturbios dentro y fuera del Estadio Olímpico entre grupos ultras que llegaron a acosar y perseguir a particulares desplazados desde Bilbao para la ocasión. Sin embargo, la cosa no quedó ahí, ya que, al terminar el encuentro, donde los de Ernesto Valverde certificaron su pase a cuartos de final, aficionados locales esperaban a los visitantes a la salida del estadio. Fue entonces cuando se produjo una batalla campal en el centro de Bilbao. Hubo incendio de contenedores y destrozos en el mobiliario urbano y terrazas de bares. En estos altercados se detuvo a ocho seguidores más de la afición local por desórdenes públicos. Tan solo uno de los detenidos permanece en dependencias policiales , el resto ya han sido puestos en libertad tras realizarse las diligencias pertinentes, a la espera de que sean citados por las autoridades judiciales.