Salvajes imágenes: hordas de ultras siembran el terror por las calles de Recife

Lo milagroso es que sólo se hayan contabilizado una docena de heridos hospitalizados después de ver los vídeos y fotografías de lo sucedido este fin de semana en la ciudad brasileña de Recife poco antes del partido correspondiente a la sexta jornada del Campeonato Pernambucano disputado entre dos clubes cuya rivalidad es histórica: Sport y Santa Cruz. En esas imágenes se aprecia a cientos de aficionados de ambos equipos recorriendo varias calles y avenidas de Recife sembrando el caos y el terror. Las peleas convirtieron la capital del estado de Pernambuco en un campo de batalla que obligó a decenas de comerciantes a cerrar sus establecimientos . Los violentos, en grupos y vistiendo los uniformes de sus respectivos equipos, destrozaron mobiliario urbano en las proximidades del estadio Arruda y obligaron a sus rivales a huir en desbandadas que generaron pánico en la mayor ciudad del nordeste de Brasil. Vídeos publicados en las redes sociales exhiben peleas generalizadas, aficionados huyendo a las carreras de sus agresores, la deflagración de artefactos explosivos y miembros de barras bravas cargando piedras y garrotes. En uno de los vídeos es posible ver a un aficionado de Sport rendido en el piso y pateado por cerca de diez hinchas del Santa Cruz y hasta por un motociclista, que le arrojó su vehículo encima. Según algunos comerciantes, en medio de la confusión, los hinchas saquearon supermercados y tiendas en el centro de Recife. La gobernadora de Pernambuco, Raquel Lyra , anunció en las redes sociales que autorizó el envío de 700 agentes de la Policía Militarizada para contener las peleas y que está adoptando las medidas necesarias para «sancionar a los vándalos y a los responsables por la barbarie». «Los verdaderos aficionados y la población no pueden, y no van, a quedarse arrinconados por los que usan el fútbol para practicar la violencia», afirmó. El alcalde de Recife, João Campos , también se refirió a los hinchas violentos como vándalos y dijo que es urgente identificarlos y sancionarlos. Pese a la violencia y a las peticiones de algunas autoridades para suspender el partido, la Federación Pernambucana de Fútbol lo mantuvo en el horario que estaba programado el sábado. En la cancha, Santa Cruz se impuso por 1-0 en un partido disputado ante los más de 27.000 espectadores que acudieron al estadio Arruda . Curiosa y afortunadamente, en las gradas no se registraron incidentes.