Investigan a una leyenda del ciclismo por pagar a dos paramilitares para asesinar y hacer desaparecer a cuatro vecinos
El exciclista colombiano Luis Alberto ‘Lucho’ Herrera, una de las glorias del ciclismo del país sudamericano en la década de 1980, negó el lunes su presunta participación en un caso de desaparición forzada y homicidio de campesinos perpetrado hace dos décadas.
Herrera se ha pronunciado después de que una juez ordenara a la Fiscalía que investigue si presuntamente pidió a grupos paramilitares que desaparecieran y luego asesinaran en 2002 a cuatro campesinos en Fusagasugá, un pueblo a 70 kilómetros de Bogotá, del que es oriundo el ciclista.
El caso se hizo público el domingo tras una investigación del canal local Noticias Uno que reveló una sentencia de dos confesos paramilitares presos que admitieron su responsabilidad en la desaparición de los campesinos y confesaron la supuesta participación de Herrera.
Instrucciones directas de Herrera
Según la sentencia, Luis Fernando Gómez, alias “Ojitos”, aseguró que se reunió con Herrera para recibir instrucciones antes de cometer el crimen. Dijo que les dio las fotografías de los campesinos, asegurando que supuestamente eran guerrilleros, junto a un sobre con dinero para comprar armas y una motocicleta.
El paramilitar relató que Herrera les entregó dos sobres: uno con las fotografías de quienes señalaba como milicianos de la guerrilla, otro con los 40 millones de pesos ( casi 18.000 euros) en efectivo. También narró el crimen. Dijo que llegaron hasta las viviendas de los campesinos con brazaletes del DAS, la ya desmantelada institución de inteligencia, los asesinaron “y los enterraron en la misma finca del señor Lucho Herrera”. Dice, también, que “luego se supo que estas personas no eran milicianas de la guerrilla, sino que no quisieron venderle las tierras a Lucho Herrera y que por eso fue que los mandó asesinar”.
El otro paramilitar identificado como Óscar Andrés Huertas, alias “Menudencias”, relató que tras el asesinato enterraron los cuerpos en una finca. “Los degollamos y luego los descuartizamos con un machete”, indicó en su versión, según apartes de la sentencia divulgada.
El ex ciclista ha defendido su inocencia a través de un comunicado. “Jamás he pertenecido a organizaciones criminales ni he pretendido causar daño a persona alguna. Mi vida la he dedicado al deporte, y tras mi retiro del ciclismo profesional, a trabajar de forma honesta”, sentencia.