Ramón Hernández tomó el mando en Maracay

Hernández fue la nota más llamativa en una jornada intensa para él, en la que atendió la rueda de prensa de presentación del equipo, tomó propiedad de su nueva oficina y condujo la práctica en el mismo terreno donde logró tantos aplausos como jugador refuerzo.

“Nunca imaginé que iba a dirigir a los Tigres”, confesó.

El sucrense vio llegar para su primera sesión de trabajo a cinco peloteros, mayoría de jóvenes, entre quienes sobresalieron el catcher Carlos Garay, usado con bastante frecuencia en el torneo pasado, y Yeltsin Gudiño, el campocorto adquirido en un cambio con las Águilas del Zulia, prospecto de alto nivel.

“Siempre quise ser manager, era un reto que siempre he deseado desde que me retiré como pelotero”, dijo Hernández a los medios de comunicación presentes. “No vengo a quedarme sólo un año aquí, hay un buen grupo de trabajo. Quiero quedar campeón y continuar”.

El nativo de Cumaná se declaró alumno de Luis Dorante y Oswaldo Guillén.

“Mi filosofía se basa en pitcheo y defensa”, explicó. “El bateo va a estar. Yo fui receptor, y para mí, los lanzadores y la defensa ayudan a mantener el juego cerca”.

Hernández se encontró con Dennis Abreu, que se estrena como coach de banca y, por tanto será su asistente principal.

Abreu estuvo al mando durante la primera semana de labores en Maracay.