Ibuprofeno y a trabajar

Con la desescalada transformada en descenso extremo, dibujando una uve como la que en 2020 anunció el Gobierno para la economía, pero invertida y en otro sitio, se empieza a echar de menos a Fernando Simón -surfero o esquiador, tanto monta, tiene tablas- como locutor de una prueba de riesgo cuya definitiva normalización pública está pidiendo a gritos el aporte de frivolidad, desenfado e inconsecuencia con que el director de Alertas Sanitarias comenzó a narrar la pandemia, sin rigor, científico o mortis. Con Carolina Darias al frente de la cogobernanza vírica y con el debate sobre el fin de las mascarillas en interiores a las puertas mismas del Congreso, los tecnicismos que circulaban por el pico de la curva, final... Ver Más