Travesía por el Massif des Arves (20-21 Marzo 2021) (4 respuestas)
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El invierno da paso a la primavera y con ella me doy cuenta que esto empieza a acabarse, con la nieve empezando a desaparecer de los macizos periféricos de los Alpes y restringiéndose cada vez más a las montañas más altas. Me doy cuenta también que me quedan un montón de reportajes que poner, aunque no creo que los haga todos porque algunas salidas son comparativamente poco interesantes. Sea como sea, la primavera llegó un bonito y soleado fin de semana de Marzo. Llevábamos unos días hablando de planes posibles para ese fin de semana de buen tiempo, y sonaba con insistencia la idea de pasar noche en un refugio. Había nevado hacía poco, y después de un período más bien seco eso significaba que el riesgo de avalanchas era considerable. En mi opinión, había que buscar orientaciones umbrías para mantener la calidad, pero de ser posible de menos de 30 grados para mantener la seguridad. Se propusieron varios sitios, al final salió vencedor el Refuge des Aiguilles d'Arves. Un entorno que en un principio me parecía soso mirando el mapa, con bajadas demasiado empinadas en las orientaciones que interesaban y poco interesantes en las demás. Por suerte, el plan no defraudó.
El valle visto en Google Earth, justo al sur de Valloire, antes de subir el Col du Galibier
Salimos pronto, con el sol acariciando el macizo de Bauges antes de rodear Belledonne por el norte.
Paramos a comprar leña en un supermercado, pues no sabemos seguro si va a haber en el refugio. Al girar hacia el sur, dejando el valle de Maurienne y entrando en el de Valloire, vemos los efectos del viento, que han dejado las montañas que llevan hacia el Galibier muy peladas. Los ánimos decaen por un momento, hasta que vemos que nuestro valle, orientado Este-Oeste en vez de Norte-Sur, se ha librado del vendaval. Empezamos a andar en el pueblo de Bonnenuit, 1700 metros, cargados como mulas con la leña y el vino para la noche.
El paraje es idílico, pero la nieve nueva sobre la nieve primavera anterior hace una superfície muy resbaladiza y los primeros metros de subida se hacen duros al no sujetar bien las pieles. Al cabo de un rato llegamos a las granjas bucólicas de Les Aiguilles, a 1850 metros.
Aquí empieza el valle propiamente dicho, largo de narices y muy llano. Sin peso sería un paseo, pero con las mochilas que llevamos se hace más largo de lo debido. No pasa nada, la aproximación es poca cosa de todas formas y no hay prisa. Empezamos a ver les Aiguilles...
Subo maldiciendo el vino y la leña, y las laderas tan apetecibles que tenemos al sur, esas orientaciones norte con esa nieve tan buena pero la pendiente un poquito demasiado pronunciada para ser seguro estos días, y los restos de avalanchas naturales de grandes dimensiones recordándome que evitar esas laderas es una buena decisión...
Después de los últimos 100 metros maldiciendo la mochila....
Llegamos al refugio, 2240 metros bien llevados y rodeado de montañas de más de 3000. Al sur tenemos la impresionante cara norte de la Crête d'Argentière, con la Aiguille d'Argientère irguiéndose por encima del refugio. Estamos a los pies de l'Aiguille de l'Épaisseur, montaña para todos los niveles y que debería ser segura al no alcanzar los mágicos 30 grados de pendiente. La duda es si hacerla hoy o mañana, al ser una cara SE preocupa que la nieve no esté bien (si ya os decía yo, que había que buscar sitios donde las bajadas seguras fueran umbrías...)
Preguntamos a gente que baja que tal la nieve: mala. Pues si ya está mala ahora, con un poco de suerte mañana por la tarde estará transformada, ¿no? Oye, y si vamos a esquiar un poco de polvo, ya que estamos aquí con una enorme cara norte delante? Esa ladera de ahí no debería sobrepasar los 30, además es muy limpia, terreno sencillo, y subiendo con un poco de cabeza y bajando de forma responsable es una buena opción.
¡Pues subimos!
Y así hasta arriba. Buenas vistas sobre las 3 Aiguilles principales, y la hermana menor que subiríamos domingo....
¿Parte de nieve? Polvo, todo abierto
El desnivel es modesto, pero las curvas saben a gloria y hay que subir a por otra.... y así quedan las firmas después de dos bajadas.
Aún quedamos 3 con suficientes ganas para subir a por la tercera, llevando el total del día a unos 1300 metros, de los que 550 con una mochila de más de 25 kg...
Últimas luces sobre una cara norte que ha disfrutado de muchas horas de sol, demasiadas para tener derecho a conservar tan bien la nieve pasadas las tres de la tarde a finales de marzo...
Para la tercera, habiendo visto en las subidas que no se sobrepasan los 30 grados y que la nieve no ha formado placas por aquí, nos atrevemos a bajar a 2... Menuda gozada con el sol escondiéndose detrás de les Aiguilles d'Arves....
Ahora sí que nos volvemos al refugio, fatigantes los últimos 100 metros de subida, con las pieles congeladas, el sol ya escondido y ningún objetivo otro que llegar...
Había dormido poco o nada la noche anterior y llego casi vomitando de cansancio, por lo que me retiro rápido a echar una siesta, despertadme cuando vayais a cenar........
Me despierto desorientado, pero las risas del comedor me ubican rápidamente y el olor a glühwein me recuerda que hemos venido a pasarlo bien. Entre risas, juegos y comida de calidad cuestionable pasan las horas hasta que nos vamos todos a dormir, mañana vamos a por el piquito ese....
Continuará:)
El valle visto en Google Earth, justo al sur de Valloire, antes de subir el Col du Galibier
Salimos pronto, con el sol acariciando el macizo de Bauges antes de rodear Belledonne por el norte.
Paramos a comprar leña en un supermercado, pues no sabemos seguro si va a haber en el refugio. Al girar hacia el sur, dejando el valle de Maurienne y entrando en el de Valloire, vemos los efectos del viento, que han dejado las montañas que llevan hacia el Galibier muy peladas. Los ánimos decaen por un momento, hasta que vemos que nuestro valle, orientado Este-Oeste en vez de Norte-Sur, se ha librado del vendaval. Empezamos a andar en el pueblo de Bonnenuit, 1700 metros, cargados como mulas con la leña y el vino para la noche.
El paraje es idílico, pero la nieve nueva sobre la nieve primavera anterior hace una superfície muy resbaladiza y los primeros metros de subida se hacen duros al no sujetar bien las pieles. Al cabo de un rato llegamos a las granjas bucólicas de Les Aiguilles, a 1850 metros.
Aquí empieza el valle propiamente dicho, largo de narices y muy llano. Sin peso sería un paseo, pero con las mochilas que llevamos se hace más largo de lo debido. No pasa nada, la aproximación es poca cosa de todas formas y no hay prisa. Empezamos a ver les Aiguilles...
Subo maldiciendo el vino y la leña, y las laderas tan apetecibles que tenemos al sur, esas orientaciones norte con esa nieve tan buena pero la pendiente un poquito demasiado pronunciada para ser seguro estos días, y los restos de avalanchas naturales de grandes dimensiones recordándome que evitar esas laderas es una buena decisión...
Después de los últimos 100 metros maldiciendo la mochila....
Llegamos al refugio, 2240 metros bien llevados y rodeado de montañas de más de 3000. Al sur tenemos la impresionante cara norte de la Crête d'Argentière, con la Aiguille d'Argientère irguiéndose por encima del refugio. Estamos a los pies de l'Aiguille de l'Épaisseur, montaña para todos los niveles y que debería ser segura al no alcanzar los mágicos 30 grados de pendiente. La duda es si hacerla hoy o mañana, al ser una cara SE preocupa que la nieve no esté bien (si ya os decía yo, que había que buscar sitios donde las bajadas seguras fueran umbrías...)
Preguntamos a gente que baja que tal la nieve: mala. Pues si ya está mala ahora, con un poco de suerte mañana por la tarde estará transformada, ¿no? Oye, y si vamos a esquiar un poco de polvo, ya que estamos aquí con una enorme cara norte delante? Esa ladera de ahí no debería sobrepasar los 30, además es muy limpia, terreno sencillo, y subiendo con un poco de cabeza y bajando de forma responsable es una buena opción.
¡Pues subimos!
Y así hasta arriba. Buenas vistas sobre las 3 Aiguilles principales, y la hermana menor que subiríamos domingo....
¿Parte de nieve? Polvo, todo abierto
El desnivel es modesto, pero las curvas saben a gloria y hay que subir a por otra.... y así quedan las firmas después de dos bajadas.
Aún quedamos 3 con suficientes ganas para subir a por la tercera, llevando el total del día a unos 1300 metros, de los que 550 con una mochila de más de 25 kg...
Últimas luces sobre una cara norte que ha disfrutado de muchas horas de sol, demasiadas para tener derecho a conservar tan bien la nieve pasadas las tres de la tarde a finales de marzo...
Para la tercera, habiendo visto en las subidas que no se sobrepasan los 30 grados y que la nieve no ha formado placas por aquí, nos atrevemos a bajar a 2... Menuda gozada con el sol escondiéndose detrás de les Aiguilles d'Arves....
Ahora sí que nos volvemos al refugio, fatigantes los últimos 100 metros de subida, con las pieles congeladas, el sol ya escondido y ningún objetivo otro que llegar...
Había dormido poco o nada la noche anterior y llego casi vomitando de cansancio, por lo que me retiro rápido a echar una siesta, despertadme cuando vayais a cenar........
Me despierto desorientado, pero las risas del comedor me ubican rápidamente y el olor a glühwein me recuerda que hemos venido a pasarlo bien. Entre risas, juegos y comida de calidad cuestionable pasan las horas hasta que nos vamos todos a dormir, mañana vamos a por el piquito ese....
Continuará:)