Ya son doce los solitarios que han regresado a Les Sables

El «L'Occitane en Provence» es uno de los IMOCA sobre el que había mucha expectación tras su botadura en enero de 2020. Un diseño se Samuel Manuard, con proa redonda -conocida como Scow, que le aporta más volumen al velero en esa zona- y con hidroalas que tiene su entrada y salida en el casco en la zona próxima la cubierta, en vez de tenerla sobre la línea de flotación; y construido por el astillero francés Black Pepper Yacths.<iframe width="510" height="400" src="https://www.youtube.com/embed/U8DspxBl8AM" frameborder="0" allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture" allowfullscreen></iframe> Armel Tripon, marino con larga experiencia en los trimaranes de la clase Multi 50, contaba con nuevo IMOCA para la Vendée Globe que, hacía presagiar una buena regata, pero desde el principio tuvo muchos problemas con los “hook” de las velas en tope del mástil que le dejaron descolgado del grupo delantero de la flota, hundiéndose hasta el puesto 32 y lentamente ha ido recuperando posiciones hasta finalizar en el puesto 11.<iframe width="510" height="400" src="https://www.youtube.com/embed/cU91iJqNgeI" frameborder="0" allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture" allowfullscreen></iframe> Las ultimas 300 millas de navegación por el Golfo de Vizcaya fueron agotadoras para Tripon porque tuvo que reducir la velocidad del «L'Occitane en Provence» por los fuertes vientos de poniente, que superan los 30 nudos, y una mar muy encabritada con olas superiores a los 5 metros. Condiciones meteorológicas que están previstas para estos días en el golfo, pero que a los IMOCA con foils se les atraganta como se ha podido comprobar durante todo el recorrido de la vuelta al mundo a vela en solitario. Y además los víveres a bordo ya escaseaban, ya no le quedaba nada para comer más que unos bizcochos y un poco de miel. Armel Tripon ha sido uno de los patrones más elocuentes durante esta Vendée Globe, ha desgranado con sensibilidad sus vivencias más en lo personal que en las cuestiones técnicas o sobre su remontada, como cuando se topó con su primer albatros en la puerta de los Mares del Sur: "Lo veo, noble y majestuoso en su vuelo deslizante, como suspendido… la pureza de las noches donde las estrellas brillan como nunca. Las regatas oceánicas tienen que ver con lo inesperado, son la escuela de la paciencia”. Describe el paisaje desde la cabina "como cuando un niño mira por la ventanilla del coche de camino a sus vacaciones”. Los números del «L'Occitane en Provence», finalizada la regata, ha recorrido 24.365 millas a una velocidad media de 11,98 nudos -sobre el fondo del mar, 28.315 millas a una media de 13,93 nudos-, y sus tiempos de paso han sido: en el Ecuador 5d 4h 45min (en el puesto 24) después del líder, cabo de Buena Esperanza 5d 17h 37min (en el puesto 17) después del líder, cabo Leeuwin 4d 23h 29min (en el puesto 14) después del líder, cabo Hornos 3d 18min después del líder y el Ecuador de vuelta a 3d 01h 20min (en el puesto 11) después del líder. Por el canal de entrada de Le Sables d´Olonne hasta los pantalanes, Armel Tripon comentaba: "Es una gran recompensa para los patrocinadores, para todo el equipo y para mí. Creo que todos hemos tenido problemas, lo sabemos al principio, es parte del juego. He disfrutado cada día. Fue simplemente mágico. Me divertí mucho en el agua. La rotura del J3 fue un pequeño hándicap en mi regata, pero conseguí remontar. Tuve que hacer una segunda parada después del Cabo de Hornos, donde volví a romper un “hook”, por lo que ya no tenía la vela de proa, que se estaba volviendo problemática. Un poco difícil porque venía bien en los otros. El objetivo al principio era traer el barco de vuelta, y eso está hecho. Es una gran recompensa para toda la gente que se esfuerza, significa que el barco es muy bueno. Es fácil vivir a bordo y manejarlo. Vine aquí buscando el gran Sur y esta regata sostenida. Descubrí lo que era estar solo en el mar, en este mundo salvaje. La Vendée Globe sigue siendo muy teórica cuando no la has hecho”. El rendimiento del «L'Occitane en Provence» ha sido positivo para Tripon al margen de las averías con los hook, que encaja en la filosofía de la Vendée Globe con navegación en rumbos portantes, y que le ha permitido estar por encima del 80% de su potencial. Clarisse Cremer es la siguiente en entrar en la olla del Golfo de Vizcaya cuando se encuentra a 566,7 millas de la llegada con su velero «Banque Populaire X». Probablemente las condiciones meteorológicas con las que se encuentre en este tramo final no sean tan virulentas como las que tuvo Armel Tripon. En el parte de posiciones de las 12 horas de este lunes, 1 de febrero de 2021, en la jornada 85 Vendée Globe, el «Banque Populaire X» está en una latitud por encima de la zona de Finisterre, a 200 millas de cabo Ortegal. Es presumible que Cremer haga una aproximación a este cabo navegando amurada a estribor, que después realizase un bordo corto trasluchando a babor y vuelva a trasluchar a estribor para colocarse próxima a la latitud de Le Sables d´Olonne y poder navegar en el flujo de viento menos intenso que le llega desde las borrascas atlánticas. Mientras tanto ella mantiene sus ojos clavados en los archivos meteorológicos para comprender mejor la fuerte depresión que está azotando el Golfo de Vizcaya.