Escuchando a un maestro
En estos días de enero el devenir de las cosas se aplaca, todo se serena y se abre una ventana a la reflexión. Buen momento para escuchar a un maestro, y si hay algo que distingue a Ángel Guastella, es que ejerció la docencia desde que era un pibe hasta el último día de su vida.
Aún en estos tiempos de tecnología aplicada al deporte, coaching y grandes staffs de entrenadores para conducir a un equipo, la palabra de un maestro como Papuchi es muy necesaria. Él solo era todo un staff. Lo demuestra la admiración que le profesa Bernardo Urdaneta, uno de los entrenadores mas actualizados del rugby argentino: “Sus palabras han sido muy importantes para mi y no las olvido mas. Cada aporte de Don Ángel (siempre se refiere así a Guastella) fue fundamental. Desde cuestiones básicas del juego hasta los libros que él se había llevado a su habitación del hotel Catalinas. Don Ángel ha compartido conmigo hasta libros de biomecánica. Era muy generoso. Compartía su enorme conocimiento y también su biblioteca. Cada encuentro con él para mi eran momentos mágicos. Tener a disposición un maestro con la capacidad de don Ángel me mejoró como entrenador y reafirmó mi conocimiento sobre la esencia del rugby”.
Es un buen ejercicio escuchar a don Ángel Guastella, cada palabra es un valor para guardar. Un sabio en el espacio Retro de hoy.