Mariano reivindica el gol que le falta al Madrid

Mariano celebró su gol con el puño cerrado y en alto. Es un símbolo de solidaridad y apoyo, utilizado para expresar unidad, fuerza o desafío. El saludo se remonta a la antigua Asiria como un símbolo de resistencia. Eso es lo que hace el delantero del Real Madrid, resistir ante una situación difícil. Considerado el tercer ariete del campeón, las bajas de Benzema y de Jovic le permitieron ser titular. Y aprovechó la oportunidad. Mordió, presionó con su potencia incansable y enojó a los centrales del Villarreal, Albiol y Pau Torres, con su choque constante. Marcó el tanto visitante a los 105 segundos, en la primera ocasión de su equipo. Demostró ese acierto ante el gol que el conjunto madrileño no tiene y que Mariano consiguió como una excepción que confirma la regla.

Jugó bien el delantero de origen dominicano. No dejó de correr durante los 85 minutos que jugó para no dejar sacar el balón en corto al conjunto amarillo. Algunos cuestionaron a Zidane po no dejarle disputar los noventa minutos. «Hacía mucho tiempo que no jugaba y estaba agotado», contestó el entrenador, que se molestó por las preguntas críticas sobre el equipo, su situación personal y el estado de Hazard. «Hazard lleva tiempo sin jugar y hay que gestionar bien los minutos, pero está bien», adujo el francés». Y remató: «Yo tengo la misma ilusión y siempre va a ser así. Vosotros seguid con lo que estáis haciendo y yo con mi trabajo».

Mariano anotó su segunda diana en los 127 minutos de Liga que ha protagonizado esta temporada. No ha debutado en la Champions. Zizou le aconsejó marcharse el verano pasado, pero el delantero es tozudo y piensa que tiene el gol que necesita el Real Madrid. Solo necesita oportunidades. Lo demostró ayer. Y lo plasmó en el mes de febrero cuando firmó aquel gol al Barcelona, el 2-0, en un compendio de potencia, velocidad y capacidad de desmarque. Lo rubricó al medio minuto de saltar al césped. Hoy no ha tardado ni dos.

Los equipos, poco fiables, subraya Nacho

Su ansia por gustar y su concentración por triunfar merece más atenciones de Zidane. Mariano es un artillero, lleva el gol en la cabeza y lo aportará al Real Madrid si le dejan jugar. Solo él mostró en el estadio de La Cerámica esa agresividad en el área de la que adolece su equipo. Nadie más supo disparar con peligro ni pisó al área con decisión. Asenjo no tuvo que realizar paradas. Dato sintomático.

«Merecimos mucho más», decía Zinedine. «Hemos perdido dos puntos. Hay que felicitar a mis jugadores por el partido y me molesta el empate por el esfuerzo que han hecho». Era cierta esa entrega, pero el Real Madrid quiso dormir el encuentro tras el 0-1 y no buscó un segundo tanto. Lo pagó caro. Es verdad que sufría bajas importantes, una realidad que no impedía analizar su carencia de profundidad.

El veterano Nacho puso el tiro en la diana sobre la dificultad que acusan todos los futbolistas en medio de esta pandemia: «Estamos en una temporada atípica, complicada. Ningún equipo es fiable al cien por cien. Hay que tener en cuenta que venimos casi de empalmar con la anterior temporada y el que esté un poquito mejor se llevará la Liga».