OpenAI alcanza los US$500.000 millones y dispara rally global en tecnología pese a la crisis política en EE.UU.
Los mercados financieros globales viven una semana de contrastes. Mientras la política estadounidense enfrenta el primer cierre gubernamental en siete años, con un apagón de datos oficiales clave y nuevas tensiones arancelarias, el optimismo bursátil se enciende gracias a la inteligencia artificial. El hito lo marcó OpenAI, que alcanzó una valoración récord de US$500.000 millones tras una venta secundaria de acciones, consolidándose como la startup más valiosa del mundo.
El impacto fue inmediato: el Nasdaq 100 y el índice de semiconductores de Filadelfia anotaron máximos históricos, con avances destacados de Nvidia, AMD, Intel y Tesla. En Europa, el Stoxx 600 subió 0,7% con fuerte tracción tecnológica, mientras que en Asia el MSCI Asia Pacific tocó nuevos récords gracias al salto de Samsung (+4,5%) y SK Hynix (+11%), tras unirse al proyecto Stargate de OpenAI.
En consecuencia, la inteligencia artificial se consolidó como motor de los mercados. Morgan Stanley elevó su precio objetivo para Apple a US$298 y para Alphabet a US$270, reforzando la narrativa alcista del sector. El entusiasmo por la IA logró eclipsar, al menos temporalmente, los riesgos políticos en Washington.
Cierre de gobierno en EE. UU. y datos económicos débiles
En contraste, la economía estadounidense enfrenta un panorama complejo. El cierre gubernamental ha interrumpido la publicación de datos clave como las nóminas no agrícolas, obligando a la Reserva Federal a apoyarse en reportes privados. El informe ADP mostró una caída inesperada del empleo en septiembre, mientras que el índice ISM manufacturero encadenó su séptima contracción.
A pesar de ello, el mercado descuenta casi por completo un recorte de tasas de 25 puntos básicos a fin de mes y otorga 80% de probabilidad a otro en diciembre. Los rendimientos del Tesoro a 10 años se estabilizaron en 4,09%, tras retroceder desde 4,80% en enero.
Escenario político y corporativo
El presidente Donald Trump intensificó su estrategia en medio del cierre, planteando recortes de empleos federales y un paquete de ayuda a agricultores de entre US$10.000 y US$14.000 millones, financiado con ingresos arancelarios. También propuso reembolsos directos a los contribuyentes de entre US$1.000 y US$2.000.
Fitch advirtió que un cierre prolongado podría tensionar las finanzas públicas, mientras que el FMI alertó sobre riesgos inflacionarios desiguales a nivel global.
En el frente corporativo, Pfizer alcanzó un acuerdo con la Casa Blanca que dio oxígeno al sector salud. En paralelo, Amazon enfrenta investigaciones tras un accidente con drones en Arizona, lo que añade presión regulatoria. Intel, por su parte, evalúa sumar a AMD como cliente de su negocio de fundición, en un movimiento que podría redefinir la competencia en semiconductores.
Perspectivas globales
De cara al futuro, Felipe Mendoza, Analista de Mercados ATFX LATAM, prevé que la inteligencia artificial seguirá siendo el principal catalizador de los mercados, mientras que la evolución de la política en EE. UU., la respuesta de los bancos centrales y los riesgos geopolíticos marcarán la dirección del ciclo económico hacia 2026.