Los insectos de The Elder Scrolls V: Skyrim eran tan realistas que casi se cargan el juego
Los artistas de Bethesda tenían una gran libertad para introducir nuevas características en sus juegos, pero la introducción de mariposas y hormigas trajo problemas previos al estreno de Skyrim.
The Elder Scrolls V: Skyrim es uno de esos juegos que han pasado ya a la historia de la industria. Una aventura de rol inolvidable lanzada originalmente en 2011 para PC, PS3 y Xbox 360 que se convirtió en todo un fenómeno entre los jugadores y que en pleno 2025 sigue estando muy vigente gracias a un mundo que reacciona a nuestras acciones y que transmite la sensación de estar vivo.
Jeff Gardiner, antiguo productor de Bethesda (abandonó la compañía en 2021 tras 15 años trabajando en ella), ha explicado que los equipos de desarrollo tenían muchísima libertad y que una vez terminaban las tareas que tenían asignadas, les permitían crear cualquier cosa que se les ocurriera para incluirlas en los juegos.
Como podréis suponer, si los juegos del estudio hacen gala de tantísimos pequeños detalles es precisamente por este método de trabajo, aunque, obviamente, esto también trajo algún que otro problema de vez en cuando. Y con The Elder Scrolls V: Skyrim hubo un par de anécdotas de lo más curiosas relacionadas con los insectos, los cuales casi rompen el título poco antes de llegar a las tiendas.
"Esto también nos trajo algunos dolores de cabeza al final del juego, cuando estábamos intentando lanzarlo", explica Gardiner. "Pusieron mariposas y un sistema que hacía que oliesen las flores de tu inventario y empezaran a seguirte por el juego".
"Pero esto era muy costoso. Quiero decir que era muy exigente a nivel de procesamiento, ya que las mariposas del juego tenían que detectar si el jugador tenía flores o no. No parábamos de preguntarnos por qué el juego iba tan lento y tras varias horas caímos en la cuenta que era porque había un script que hacía que atrajeras mariposas si llevabas flores".
Algo parecido ocurrió con las hormigas, ya que el artista Mark Teare introdujo estos insectos en el título, aunque accidentalmente hizo que sus cuerpos proyectasen sombras. En aquel entonces, la proyección de sombras era una de las cosas que más recursos consumían en videojuegos, por lo que os podéis hacer una idea de lo que provocó que el título tuviese que proyectar las diminutas sombras de miles de hormigas a la vez.
The Elder Scrolls V: Skyrim es uno de esos juegos que han pasado ya a la historia de la industria. Una aventura de rol inolvidable lanzada originalmente en 2011 para PC, PS3 y Xbox 360 que se convirtió en todo un fenómeno entre los jugadores y que en pleno 2025 sigue estando muy vigente gracias a un mundo que reacciona a nuestras acciones y que transmite la sensación de estar vivo.
Las mariposas y hormigas causaron estragos en Skyrim antes de su lanzamiento
Jeff Gardiner, antiguo productor de Bethesda (abandonó la compañía en 2021 tras 15 años trabajando en ella), ha explicado que los equipos de desarrollo tenían muchísima libertad y que una vez terminaban las tareas que tenían asignadas, les permitían crear cualquier cosa que se les ocurriera para incluirlas en los juegos.
Como podréis suponer, si los juegos del estudio hacen gala de tantísimos pequeños detalles es precisamente por este método de trabajo, aunque, obviamente, esto también trajo algún que otro problema de vez en cuando. Y con The Elder Scrolls V: Skyrim hubo un par de anécdotas de lo más curiosas relacionadas con los insectos, los cuales casi rompen el título poco antes de llegar a las tiendas.
"Esto también nos trajo algunos dolores de cabeza al final del juego, cuando estábamos intentando lanzarlo", explica Gardiner. "Pusieron mariposas y un sistema que hacía que oliesen las flores de tu inventario y empezaran a seguirte por el juego".
"Pero esto era muy costoso. Quiero decir que era muy exigente a nivel de procesamiento, ya que las mariposas del juego tenían que detectar si el jugador tenía flores o no. No parábamos de preguntarnos por qué el juego iba tan lento y tras varias horas caímos en la cuenta que era porque había un script que hacía que atrajeras mariposas si llevabas flores".
Algo parecido ocurrió con las hormigas, ya que el artista Mark Teare introdujo estos insectos en el título, aunque accidentalmente hizo que sus cuerpos proyectasen sombras. En aquel entonces, la proyección de sombras era una de las cosas que más recursos consumían en videojuegos, por lo que os podéis hacer una idea de lo que provocó que el título tuviese que proyectar las diminutas sombras de miles de hormigas a la vez.