'Los jugadores que piratean videojuegos no son los mismos que los compran': GOG explica su experiencia
En GOG explican que gracias a las propuestas que promueven, hacen que los jugadores puedan tener acceso a juegos de forma lícita.
La preservación del videojuego es un asunto serio, en muchas ocasiones amenazado por la propia industria, que no ha invertido los suficientes esfuerzos en conservar videojuegos en riesgo de perderse para siempre. A estos efectos, la piratería en algunas circunstancias contribuyó a que cantidad de jugadores pudieran disfrutar de títulos difíciles de obtener de otra manera. Sobre esto quisimos preguntar a los responsables de GOG, el servicio de venta y distribución de juegos de CD Projekt.
¿La razón? Que en Polonia hubo un tiempo en que la única manera de jugar a videojuegos era piratearlos. Así nos lo explicó Piotr Gnyp, Senior PR de GOG: "Es un asunto delicado. Para comprenderlo completamente, necesitamos considerar el contexto histórico del país. Hasta 1989, Polonia no fue un país libre. Éramos parte del bloque soviético, enfrentado por la Guerra Fría contra Occidente, lo cual significaba que la propiedad intelectual que venía desde los estados enemigos era tratado de una forma muy ligera. No fue hasta 1994 cuando se introdujo la primera ley intelectual".
En otras palabras, en Polonia se consumían videojuegos pirateados hasta que hubo realmente un mercado legal establecido. Esto es algo que encaja con algo que dijo Gabe Newell en relación a piratear juegos: "La piratería es casi siempre un problema de servicio y no un problema de precios". Comentan en GOG que es difícil estar en desacuerdo con dicha perspectiva, ya que han comprobado cómo la conducta de los consumidores cambia en el momento en que se les proporciona una manera legal y adecuada para acceder a los videojuegos: "De la misma manera que la gente consume películas, plataformas como GOG y Steam han hecho lo mismo con los juegos".
"Nuestros propios datos apoyan dicha idea", nos manifiesta Gnyp mientras afirma que "los jugadores que piratean juegos no son los mismos que los compran". Defiende que la cuestión no tiene que ver con una falta de voluntad por pagar por los juegos, sino su disponibilidad y accesibilidad. "Es por eso mismo por lo que trabajamos tanto para conseguir que los juegos clásicos se puedan conseguir de forma legal", afirman desde GOG, que se sienten orgullosos de haber podido recuperar títulos perdidos del estilo de Alpha Protocol, Resident Evil o Dino Crisis.
No obstante, en GOG también manifiestan que todavía queda un largo camino: "La realidad es que algunos juegos no están disponibles de forma legal, algo que fuerza a los usuarios a encontrar alternativas. Sabemos que quieren comprar y descargar juegos de forma segura desde sitios legítimos". Sin embargo, aclaran también que solo pueden actuar desde el marco legal, y que serían necesarios algunos cambios para hacer que la preservación de juegos resulte más sencilla: "Eso aseguraría que más juegos clásicos estuvieran disponibles para las generaciones futuras".
GOG es una subsidiaria de CD Projekt formada en 2008 y que se dedica a la distribución digital de videojuegos que destaca por ofrecer títulos libres de DRM y en los últimos tiempos ha estado muy centrada en su labor como preservadora de videojuegos, uniéndose a la EFGAMP y lanzando una iniciativa propia, permitiendo a los usuarios votar por los juegos que les gustaría que se recuperasen.
La preservación del videojuego es un asunto serio, en muchas ocasiones amenazado por la propia industria, que no ha invertido los suficientes esfuerzos en conservar videojuegos en riesgo de perderse para siempre. A estos efectos, la piratería en algunas circunstancias contribuyó a que cantidad de jugadores pudieran disfrutar de títulos difíciles de obtener de otra manera. Sobre esto quisimos preguntar a los responsables de GOG, el servicio de venta y distribución de juegos de CD Projekt.
¿La razón? Que en Polonia hubo un tiempo en que la única manera de jugar a videojuegos era piratearlos. Así nos lo explicó Piotr Gnyp, Senior PR de GOG: "Es un asunto delicado. Para comprenderlo completamente, necesitamos considerar el contexto histórico del país. Hasta 1989, Polonia no fue un país libre. Éramos parte del bloque soviético, enfrentado por la Guerra Fría contra Occidente, lo cual significaba que la propiedad intelectual que venía desde los estados enemigos era tratado de una forma muy ligera. No fue hasta 1994 cuando se introdujo la primera ley intelectual".
La piratería como un problema de servicio
En otras palabras, en Polonia se consumían videojuegos pirateados hasta que hubo realmente un mercado legal establecido. Esto es algo que encaja con algo que dijo Gabe Newell en relación a piratear juegos: "La piratería es casi siempre un problema de servicio y no un problema de precios". Comentan en GOG que es difícil estar en desacuerdo con dicha perspectiva, ya que han comprobado cómo la conducta de los consumidores cambia en el momento en que se les proporciona una manera legal y adecuada para acceder a los videojuegos: "De la misma manera que la gente consume películas, plataformas como GOG y Steam han hecho lo mismo con los juegos".
"Nuestros propios datos apoyan dicha idea", nos manifiesta Gnyp mientras afirma que "los jugadores que piratean juegos no son los mismos que los compran". Defiende que la cuestión no tiene que ver con una falta de voluntad por pagar por los juegos, sino su disponibilidad y accesibilidad. "Es por eso mismo por lo que trabajamos tanto para conseguir que los juegos clásicos se puedan conseguir de forma legal", afirman desde GOG, que se sienten orgullosos de haber podido recuperar títulos perdidos del estilo de Alpha Protocol, Resident Evil o Dino Crisis.
No obstante, en GOG también manifiestan que todavía queda un largo camino: "La realidad es que algunos juegos no están disponibles de forma legal, algo que fuerza a los usuarios a encontrar alternativas. Sabemos que quieren comprar y descargar juegos de forma segura desde sitios legítimos". Sin embargo, aclaran también que solo pueden actuar desde el marco legal, y que serían necesarios algunos cambios para hacer que la preservación de juegos resulte más sencilla: "Eso aseguraría que más juegos clásicos estuvieran disponibles para las generaciones futuras".
GOG es una subsidiaria de CD Projekt formada en 2008 y que se dedica a la distribución digital de videojuegos que destaca por ofrecer títulos libres de DRM y en los últimos tiempos ha estado muy centrada en su labor como preservadora de videojuegos, uniéndose a la EFGAMP y lanzando una iniciativa propia, permitiendo a los usuarios votar por los juegos que les gustaría que se recuperasen.